Obras maestras de vino y licores en su puerta
Envío gratuito a partir de 1000€ sin IVA (EEUU y Europa) y pedido preparado en 24h.
Joseph Krug nació en 1800 en Maguncia, entonces una ciudad germánica del Imperio Napoléon. Creció en el corazón del Mosela, enfrentado desde muy joven a una viticultura tan fragmentada como la que más tarde experimentaría al instalarse en Champagne.
A los 24 años, se estableció como comerciante y viajero comercial, instalándose finalmente en París en 1834. Joseph aprovechó entonces una oportunidad: entró en Jacquesson, una Casa de Champagne fundada en 1798.
Rápidamente se convirtió en uno de sus socios.
A la edad de 42 años con el apoyo de Hippolyte de Vivès, Joseph Krug fundó la Casa de Krug & Company en 1843. Había nacido la Maison Krug de Reims.
La Maison Krug utiliza el método de vinificación bajo madera en pequeñas barricas de 205 litros de roble francés.
La Maison Krug de Reims fue fundada en 1843
Cada año, desde la fundación de la Maison Krug, se crea una nueva Edición de Krug Grande Cuvée para ofrecer la expresión más generosa del Champagne.
La 170ª edición se elabora en torno a la cosecha 2014. La mezcla se compone de 195 vinos diferentes de 12 añadas distintas, la más antigua de las cuales es la cosecha de 1998 y la más reciente de 2014.
Los dinámicos Pinots Noirs 2014 de esta mezcla proceden de un gran número de parcelas repartidas por toda la región de Champagne. Por su parte, los Chardonnay, afrutados y con cuerpo, se seleccionaron en parcelas de Montagne de Reims, Sézannais y Côte des blancs. Particularmente brillantes, los Meuniers de Rive gauche y Vallée de la Marne se ven sublimados por la magnífica expresión afrutada de los vinos de las parcelas de Leuvrigny.
Los Pinots Noirs, por su parte, se han seleccionado a partir de vinos de Réserve de las parcelas meridionales de Montagne de Reims, famosas por su estructura, entre las que destaca un Ambonnay de 2005. Los Chardonnays de Réserve de parcelas de Avize y Mesnil-sur-Oger de muchos años ocupan un lugar de honor en esta mezcla, mientras que los Meuniers de Réserve de parcelas, en particular de 2013, aportan frescura, intensidad y estructura cincelada.
Las botellas han reposado unos siete años en bodega ganando en expresión y elegancia.
Visualmente, este Champagne se engalana con un color oro pálido y se mueve con burbujas finas y vivas, promesas de un placer incomparable.
Aromas de flores, cítricos maduros, confitados y secos, así como mazapán y pan de jengibre estimulan la nariz.
Las notas de avellana, turrón, azúcar de cebada, cítricos y jalea, almendras, brioche y miel explotan en el paladar.
Esta 170 edición es ideal para platos de marisco como rodaballo con trufas, ostras o gambas a la plancha. También será muy apreciado con parmesano curado o un toque dulce con una tarta Tatin o un cheeSecake.
