Se trata de una mezcla Premier y Grand Cru de uvas Pinot Noir (51%) y Chardonnay (49%), cosechadas principalmente en los famosos viñedos de Avize, Cramant, Le Mesnil-sur-Oger y Villers-Marmery para el Chardonnay. Aÿ, Louvois, Ambonnay, Bouzy y Verzy para el Pinot Noir.
La cuvée se ha beneficiado de 12 años de envejecimiento en la bodega desde 2007, lo que ha dado lugar a un vino complejo y afrutado. La vinificación y la crianza son tradicionales sobre lías para evitar cualquier oxidación prematura.
El color es chispeante con matices dorados.
En nariz evoca aromas de frutas de huerta de verano como el melocotón o la ciruela mirabel, piel de cítricos y toques de menta y regaliz.
El paladar es un equilibrio perfecto aportado por el chardonnay, armoniosamente equilibrado con el pinot noir, notas de naranja sanguina, limón confitado, jengibre. El final revela una longitud persistente, que continúa con la frescura y la salinidad.
Debe servirse a unos 10/12°C, pero no más bajo, para no opacar la riqueza de sus excepcionales aromas y sabores.
Maridaje: este vino es ideal para acompañar el sushi, el pescado o el marisco.
También es adecuado para postres de frutas rojas como la tarta de quetsch de Alsacia, frutas amarillas como la ciruela mirabel o los albaricoques de Creta.
Las botellas deben conservarse tumbadas en la bodega, al abrigo de la luz y el ruido, con un grado higrométrico de aproximadamente el 70% y con catas sucesivas para medir el punto álgido de este excepcional champán.
