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Obras maestras de vino y licores en su puerta
1er Grand Cru Classé en 1855.
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Es imposible hablar de los grandes vinos del Médoc sin mencionar Château Lafite-Rothschild. Un Domaine cargado de historia, cuya reputación y prestigio sólo son equiparables a los legendarios vinos que nacen en él.
Antiguo señorío medieval, fue bajo Jacques de Ségur, de una familia de parlamentarios bordeleses, cuando se plantaron las primeras vides en los años 1670. Poco a poco, el vino fue adquiriendo una excelente reputación gracias a los avances técnicos, tanto en la corte real de Versalles como al otro lado del Canal de la Mancha, con la expansión del comercio con Inglaterra. Así, en 1787, Thomas Jefferson, embajador estadounidense en Francia en aquella época, lo elogió en sus notas de viaje.
El Château Lafite fue ascendido al rango de Ier Grand Cru Classé en 1855 con motivo de la Exposición Universal de París, distinción que comparte con el Château Latour, el Château Haut-Brion y el Château Margaux, así como con el Château Mouton Rothschild desde 1973.
El posterior auge de Château Lafite debe mucho a la familia Rothschild, ya que el Barón James de Rothschild adquirió la propiedad en 1868 y le dio su nombre a partir de esa fecha. Cuando el Barón Eric tomó las riendas en 1974, todo se puso en marcha progresivamente con el objetivo de modernizar y mejorar el rendimiento, para revelar el... Ver más ...
La añada 2010 es un magnífico año vinícola para Burdeos. El tiempo seco y soleado de abril y mayo fue especialmente favorable para el desarrollo de la vid. La temporada estival estuvo marcada por la sequía y mucho calor hasta septiembre. Siguió una alternancia de noches frescas y días soleados que permitió a las uvas alcanzar una madurez perfecta.
Mezcla de la añada 2010 : 87% Cabernet Sauvignon, 13% Merlot
El color es un púrpura intenso, con tintes elegantes.
La nariz muestra una bella armonía olfativa, desprendiendo notas de frutos negros muy maduros, especias picantes, mentol y clavo. A continuación percibimos trufa y madera tostada.
El ataque en boca es flexible y meticuloso, para revelar un cuerpo denso, jugoso y carnoso. Evoluciona sobre frutas negras confitadas, crema de grosella negra y especias exóticas, envueltas en una elegante estructura tánica. El final es interminable, picante y de gran frescura.
Maridaje:
Chateau Lafite Rothschild 2010 maridará maravillosamente con un tournedos de ternera Rossini, un Chateaubriand con foie gras y salsa de setas porcini, un mignon de ternera trufado cocinado con cuerda, pero también un costillar de cordero confitado al cuatro.
Para un maridaje con queso, elija quesos de pasta prensada sin cocer como el morbier con trufas, el Saint-Nectaire, el cantal y la mimolette madurada.
Termine con un delicioso postre de chocolate: un entremet de praliné y avellanas, un bosque negro o la tarta extra de avellanas de Guillaume Mabilleau.
Potencial de envejecimiento y degustación:
Château Lafite Rothschild 2010 es un gran vino de guarda por definición, que puede esperar otros 10 años en bodega. Su punto álgido se alcanzará entre 2032 y 2037.
No obstante, puede disfrutarse ahora, colocando la botella en la habitación a temperatura ambiente la noche anterior. Abrirla y decantarla de 6 a 7 horas antes de la degustación.
Las botellas se conservarán en la bodega protegidas de la luz, tumbadas, con un grado higrométrico óptimo del 70%.
