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Obras maestras de vino y licores en su puerta
Grand Cru Classé de Graves en 1959
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Un magnífico Domaine de la denominación Pessac-Léognan, conocido por su etiqueta que muestra con orgullo un barco, Château Malartic-Lagravière es una verdadera joya. Propiedad en el siglo XVIII del Conde de Malartic, el Château fue conocido como Domaine de La Gravière hasta 1850, fecha en la que adoptó su nombre actual.
Desde 1997, pertenece a la familia Bonnie, que, añada tras añada, ha seguido sublimando los vinos con energía y pasión, elevando Malartic-Lagravière entre los grandes nombres de Burdeos.
El Château Malartic-Lagravière se basa en un viñedo de 71 hectáreas plantado en una excepcional cima de grava pirenaica.
- Las variedades de uva tinta (62 ha) son 45% Cabernet Sauvignon, 45% Merlot, 8% Cabernet Franc y 2% Petit Verdot. El grand vin envejece entre 15 y 20 meses en barricas de roble francés, de las cuales entre el 40 y el 70% son nuevas. La Réserve de Malartic es el segundo vin rouge.
- Las variedades de uva blanca (9 ha) son 80% Sauvignon blanc y 20% Sémillon. El grand vin blanc envejece de 10 a 12 meses en barricas de roble francés, de las cuales entre el 40 y el 70% son nuevas. El Réserve de Malartic es el segundo vino blanco.
El Château Malartic-Lagravière es un gran vino muy elegante, tanto tinto como blanco. Los tintos son afrutados, carnosos y estructurados, mientras que los blancos son untuosos y salinos. Sencillamente, son vinos de alta costura.
2015, qué hermosa añada para el viñedo bordelés. Fue un año cálido y seco, en el que la floración de las vides se produjo en unas condiciones preciosas en mayo, seguida de un verano soleado y seco. En agosto y septiembre llovió un poco, lo que benefició a las viñas y permitió que se reanudara el proceso de maduración. En el momento de la vendimia, las bayas eran de una calidad excepcional.
Coupage de la añada 2015: 53% Cabernet Sauvignon, 35% Merlot, 7% Petit Verdot, 5% Cabernet Franc.
El color es un rojo muy profundo, con reflejos rubí brillantes.
La nariz es deliciosamente expresiva, ofreciendo aromas golosos de frutas negras confitadas, grosella roja, madera tostada, pimienta blanca y trufa.
Suave en el ataque, es suave y voluminoso en el desarrollo, con taninos finos que le dan mucha frescura. Particularmente concentrado, con sabores de mora, crème de cassis y torrefactos, florece en un final largo, preciso y persistente.
Maridaje:
Chateau Malartic-Lagravière 2015 maridará muy bien con un Chateaubriand con salsa de trufas, chuleta de ternera cocinada a la milanesa, magret de pato con salsa de pimienta o jabalí asado marinado en vino tinto.
Para un maridaje con quesos, elija quesos de pasta prensada sin cocer como el Cantal, el Edam, el mimolette curado, el morbier con trufas o el Saint-Nectaire.
Para los postres, disfrútelo con un bavarois de chocolate, una tarta ópera o un tiramisú.
Potencial de envejecimiento y degustación:
Château Malartic-Lagravière 2015 merecería otros 5 años en bodega para afinar su potencial, y verá su apogeo entre 2028 y 2032.
Sin embargo, se puede disfrutar maravillosamente hoy. Para ello, tenga la precaución de colocar la botella en la sala de servicio a temperatura ambiente la noche anterior. Ábrala y decántela al menos 2 ó 3 horas antes de la degustación.
Las botellas se conservarán en la bodega protegidas de la luz, tumbadas, con un grado higrométrico óptimo del 70%.
