Château Saint-Pierre

Discretamente enclavado en el corazón de la denominación Saint-Julien, Château Saint-Pierre revela un néctar con un encanto insospechado. Archivos de 1693 atestiguan la existencia de Domaine, que entonces se llamaba Serançan. Fue el barón de Saint-Pierre quien lo compró bajo el reinado de Luis XV y, tras varias sucesiones, fue dividido y dispersado. Fue en 1982 cuando, con pasión y tenacidad, Henri Martin reconstituyó el Château tal y como se conocía en 1855, año en que obtuvo el título de Cuarto Grand Cru Classé durante la clasificación de los vinos del Médoc oficializada para la Exposición Universal de París.

El Château Saint-Pierre ocupa un viñedo de 17 hectáreas, plantado con un 75% de Cabernet Sauvignon, un 15% de Merlot y un 10% de Cabernet Franc. Los suelos son de grava de origen günziano, y los subsuelos, de arcilla y arena. Los vinos envejecen entre 14 y 16 meses en barricas de roble, de las cuales el 50% son nuevas.

El vino Second de Domaine se llama Esprit de Saint-Pierre.

El Château Saint-Pierre es reconocido como un perfecto representante de los grandes vinos del Saint-Julien: complejo, redondo y deliciosamente aromático.